CARNAVAL EN VENECIA
Son horas de zozobra: nuevamente peligra la paz
en este mundo. Por eso, será oportuno ventilar este muro
y sus premoniciones para que juntos perdamos la memoria.
¡Es Carnaval en Venecia, la Serenísima República!
Luces
de oro y plata estallan
sobre
contornos grises. Levitan
humedades
en puentes y canales
ajenos
a la ascensión del mármol
que contemplo hechizado.
Llevo
mi cuerpo hasta perderme
el
recuerdo de las horas
y
la exquisita bancarrota del amor
que es tan sabio
fingir en carnaval
con
el fácil halago.
Tal
vez más tarde me acordaré
de
estas hermosas noches
que
sus fiestas demoran
y
más bellas, más vivas sus luces
para
la breve orfandad del agua.
Volverá
a brillar su nostalgia
en
mi memoria por góndolas
y perfiles de máscaras.
Entonces
será real y serena
mi
felicidad.
José Baena, marzo de 2014
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